Insuficiencia valvular tricuspídea
La insuficiencia tricuspídea es una incompetencia de la válvula tricúspide que promueve el movimiento del flujo sanguíneo procedente del ventrículo derecho hacia la aurícula derecha durante la sístole.
En ocasiones, se produce debido a problemas en las válvulas causados por otras afecciones médicas y por algunas enfermedades que elevan de forma importante la presión en los pulmones y dilatan los ventrículos.
Como consecuencia, de esta sobrecarga los ventrículos se remodelan con el paso del tiempo. Durante el remodelado, los ventrículos pueden dilatarse e hipertrofiarse. Al principio, estos cambios son compensados, pero esta remodelación se asocia a resultados adversos que finalmente aumentan la rigidez y la tensión mural durante la diástole lo que compromete la función cardíaca, especialmente durante episodios de sobreesfuerzo físico.
La insuficiencia tricúspide puede clasificarse en dos tipos: primaria, cuando existe daño intrínseco de la válvula y secundaria o funcional, cuando es consecuencia de remodelación y/o disfunción del ventrículo derecho.
¿Cómo diagnosticar la insuficiencia cardíaca tricúspide?
El ecocardiograma con sus diferentes modalidades de imagen es la prueba fundamental para determinar la gravedad de la insuficiencia tricúspide. En los últimos años, los adelantos tecnológicos han permitido implementar la técnica 3D, tanto en el examen transtorácico como en el transesofágico, para evaluar la anatomía valvular tricúspide desde su aspecto auricular o ventricular y analizar la estructura de sus valvas, sus variaciones anatómicas y los diferentes mecanismos o lesiones que pueden afectar su funcionamiento adecuado y generar regurgitación tricúspide.
En el siguiente video encontrará una charla sobre la Insuficiencia tricúspide secundaria a insuficiencia cardíaca.