← Regresar a la lista de servicios

CONSULTA CARDIOVASCULAR PREVENTIVA

La Cardiología es una ciencia que tiene como objetivo la prevención, tratamiento y seguimiento de enfermedades que afectan al corazón y al sistema circulatorio, conocidas como enfermedades cardiovasculares.

Actualmente las  cardiopatías son la primera causa de muerte a nivel mundial, por lo que la prevención  es fundamental, y no solo está enfocado en personas enfermas sino principalmente en personas  sanas. Existen estrategias para lograr objetivos concretos en la prevención de enfermedades cardiovasculares. La consulta cardiológica dirigida a la prevención cardiovascular intenta detectar y promocionar prácticas saludables. Inicialmente determina  los factores de riesgo para luego establecer estrategias que ayudan a la modificación del estilo de vida y la adopción de prácticas adecuadas para reducir el riesgo cardiovascular. Las personas con enfermedades crónicas también tienen riesgo cardiovascular que puede ser manejado de manera preventiva.


¿Qué personas deben acudir a una consulta cardiovascular preventiva?

La consulta cardiovascular preventiva está dirigida a las siguientes personas:  

  • Personas sanas o con alguna enfermedad no cardiológica que desean conocer su riesgo cardiovascular.

  • Personas sanas que tienen familiares con enfermedades cardiovasculares.

  • Deportistas que desean conocer su riesgo antes de iniciar actividad física.

  • Personas sanas con familiares con sospecha o diagnóstico de cardiopatía coronaria, que incluye isquemia crónica o angina de pecho, infarto de miocardio u otra enfermedad aterosclerótica.

  • Personas con familiares con cardiopatías coronaria,  enfermedad ateroesclerótica o muerte antes de los 50 años atribuidas a enfermedades cardiovasculares.

  • Pacientes con enfermedades crónicas con riesgo cardiovascular como hipercolesterolemia o dislipidemia, diabetes, insuficiencia renal crónica, obesidad, entre otras.


¿Qué cuidados debo tener para reducir mi riesgo cardiovascular?

  • Realizar una alimentación sana, incluyendo un plan adecuado determinado por un profesional en esta área.

  • No fumar y en caso de hacerlo buscar ayuda profesional para dejar este hábito perjudicial.

  • Tener un plan de ejercicio adecuado a  mi condición física y de ser necesario acudir a un profesional para determinarlo.

  • Conocer  mi presión arterial y en caso de estar elevada controlarla mediante la asistencia de un profesional.

  • Conocer mis niveles de colesterol total y LDL para controlarlos con la ayuda de un profesional.

  • Conocer  mis niveles de glucosa y en caso de ser diabético controlarlos mediante la ayuda de un profesional.

  • Considerar un tratamiento farmacológico preventivo determinado por un profesional si soy un paciente de alto riesgo.

  • Realizar actividades recreativas que me ayuden a mantener un equilibrio y estilo de vida saludable.